Es muy importante que recuerdes que, siempre que sea posible, la protección solar debes colocarla por el exterior de la ventana, ya que así evitarás que se caliente el vidrio, transmitiéndose ese calor al interior de la vivienda.
En cuanto a luminosidad, lo ideal es que tu protección solar te proteja sin oscurecer totalmente la estancia. Esto por ejemplo es una pega de las persianas enrollables. Al oscurecer totalmente la estancia tendremos que recurrir a iluminación artificial, lo que supondrá un incremento en el gasto de nuestra factura eléctrica. Además, la iluminación artificial también aporta cierto calor al ambiente.
En una fachada a Norte la persiana enrollable puede ser una buena solución ya que esta fachada a Norte nunca recibe sol. Consecuentemente, la función de la persiana se limita a oscurecer y/o dar privacidad.